martes, 23 de junio de 2015

American Apple Pie



Que no os asuste el nombre en inglés, tan solo pretendo darle un toque más sofisticado a lo que sencillamente es una tarta de manzana deliciosa!
Hay muchas recetas de tartas de manzana, doy fe porque he probado unas cuantas y es que en casa las manzanas son la fruta más consumida desde que tengo uso de razón, mi abuelo era de los que creía firmemente que una manzana al día te aseguraba buena salud y hoy en día hay médicos que lo confirman. Él mismo, mi abuelo, llegó a una muy avanzada edad... ¿algo tendría que ver su dieta no?

Esta de hoy es una de las más ricas que he probado, si que es cierto que lleva un poco de trabajo de elaboración por la masa pero os aseguro que no es nada complicado de hacer (la cosa hoy va de familia, mi prima Olga da fe de que no es complicado hacer una masa quebrada en un momento ¿verdad?) que son ingredientes sencilllos y que el resultado será una merienda espectacular.


Qué necesitamos:

Para la masa:
  • 250 gr de mantequilla, fría y cortada en cubitos.
  • 1 cucharada de azúcar
  • 425 gr de harina para repostería
  • 125 ml. de agua muy fría (poned agua con hielo mientras preparáis y así la tendréis helada)
  • 1 pizca de sal
Comenzamos preparando la masa que tendrá que reposar un rato.
  1. Ponemos en un bol la mantequilla en cubitos, la harina, el azúcar, la pizca de sal y mezclamos con la ayuda de dos cuchillos. Si, habéis leído bien, con dos cuchillos para que nos amasemos en exceso la mantequilla y no se derrita. Conseguiremos una especie de arena gruesa.
  2. Añadimos el agua y mezclamos con las manos la masa hasta que absorba el agua. No es una masa homogénea, veremos trocitos de mantequilla, así debe quedar.
  3. Vertemos sobre la mesa de trabajo y hacemos una bola que dividiremos en dos.
  4. Envolvemos cada parte en papel film y dejamos en la nevera.

Mientras la masa reposa en la nevera para que recupere algo de frío, y poder estirarla luego bien, vamos a preparar el relleno.

Encendemos el horno a 220º.

Ingredientes del relleno:
  • 6 manzanas granny smith (estás verdes tan brillantes que parecen de mentira)
  • 300 gr de azúcar moreno
  • 1 cucharadas de canela
  • ralladura de 1 limón
  • 2 cucharadas de maicena
  • 1 pizca de sal
  • unos cuantos cubitos de mantequilla (los pondremos en el úlitmo momento)
Preparamos el relleno y montamos la tarta:
  1. Pelamos, descorazonamos y laminamos las manzanas y las vamos echando en un bol amplio.
  2. Espolvoreamos la ralladura de limón, el azúcar, la canela, la maicena y la pizca de sal y mezclamos bien (ayudándonos con las manos... bien limpias) para que la manzana se impregne. Reservamos.
  3. A continuación sacamos la masa de la nevera y en la mesa enharinada la estiramos con la ayuda de un rodillo (o una botella de cristal si no tenemos) y la ponemos en el molde dejando que sobresalga 1 cm para luego poder cerrarla.
  4. Vertemos el relleno, repartimos los cubitos de mantequilla reservados y hacemos lo mismo con la otra masa reservada, estiramos y cubrimos, juntando los bordes y apretando un poco con los dedos para que quede cerrada.
  5. Podemos aprovechar los restos de masa para hacer un dibujo, unas letras, una manzana... 
  6. Pincelamos con un poco de leche y metemos al horno, 15 minutos a 220º con calor arriba y abajo y luego entre 50 y 70 minutos más bajando a 190º.

Vigilad a partir de los 40 minutos de la segunda vez para que no se dore en exceso, si véis que ocurre podéis poner un poco de aluminio, no afectará a la cocción.

Esta tarta hay que dejar que repose unas horas, mejor de la mañana a la tarde y si puede ser para el día siguiente mejor aún, los sabores se asientan y está más gustosa.

Si lo acompañáis de una bola de helado de vainilla tendréis una merienda completa!


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